El sentimentismo es el sentir del arte en la palabra de hoy, donde el sentimiento, las emociones se retoman, se introspectan, se analizan, se estudian y así se conceptualizan volviéndolas conscientes para poder reproducirlas en una expresión artística, donde ésta al ser observada por el espectador transmite una emoción fuerte, llevándolo a su propia introspección.
Contrario al sentimentalismo que es la reacción espontánea de un sentimiento o emoción.
El sentimentismo busca elevar el espíritu humano en sus más altos preceptos y no doblegarlo.
Es una expresión libre e intima del artista.
El sentimentismo es una nueva “casa” , donde el artista verá como su deber no es dominar la forma sino adecuarla a un contenido donde el sentimiento es la materia de sus creaciones que contribuyen al desarrollo mismo en una atmósfera espiritual.
El sentimentismo basandose en las “emociones” como material de su trabajo y en donde “emoción” quiere decir energía en movimiento, nos induce al cambio constante por lo tanto una introspección profunda en el espíritu y el conocimiento interior, donde busca que el artista realmente se encuentre entendiendose, en su ser para llegar a hacer dentro de su propio concepto, en su individualidad y autenticidad.
En mi caso específico busco en el color y la línea, base del sentimiento o emoción, donde el insospechado uso del color y su combinación resurgen de su lecho intímo produciendo una reacción única al observador sumergiendolo en sus propias fantasías,
Logrando sentir el poder de lo infinito del alma.
Quiero expresar el sentimentismo como una forma de mostrar que con la pintura se puede cambiar la mirada y el sentir de las emociones en el arte y más cuando para que éste proceso se realice entren otros componentes como la palabra y la música en una fusión única, influyendo de manera contundente en la creación íntima del artista y así mismo influye en la recepción que pueda tener el espectador de la obra artística
Involucrándolo también al ser tocado en su propia intimidad y espiritualidad.
En el devenir de éste proceso he implementado mi taller “ espiritualidad creativa en el arte a través del enfoque sentimentista” donde se implementa el desarrollo de las habilidades del hemisferio derecho y así tomar el arte como una herrmienta para lograr equilibrar la percepción y el sentir de nuestro entorno, potencializando la totalidad de nuestra capacidad cerebral.
Intuitivamente dentro de éste proceso, observando las acciones del ser humano, sus conflictos, sus aciertos y desaciertos, en la carrera del avance tecnológico y competitivo, estamos en la carrera de “ hacer” y no de “ ser ” olvidándonos que para “ hacer “ hay que entendernos a sí mismos, interiorizar, asimilar no emular, para así realmente “ ser” para poder “hacer”.
En donde he dicho que el corazón es el que piensa y el cerebro ejecuta( hace las veces de un computador) sino le damos la orden él no actua.
Y lo que intuitivamente sentí, se han hecho ya investigaciones científicas donde han descubierto neuronas en el corazón.
El desajuste del inconformismo humano y de los conflictos se sucitan en ese desajuste entre mi ser interior y las exigencias del mundo mediático.