Varias son las características del trabajo artístico de la pintora, Ileana Gutiérrez,
especialmente por la fuerza de sus mensajes y el color intenso y provocador de sus representaciones. En ellas plasma, en el tiempo y en el espacio, su particular manera de hacer un aporte desde la modernidad a las distintas generaciones para que miren y vuelvan a mirar sus pinturas detenidas a veces y en movimiento siempre.
Gratifica a los ojos y a la mente encontrar la influencia de su paso por Europa, particulamente por Paris, sin perder su esencia y sus raíces colombianas, tropicales y llenas de colorido y de expresión porque comunican a cada instante que es la mayor y mejor virtud de esta pintura que, como artista, como ser, como mujer entrega siempre lo mejor a quienes siguen su inagotable creación.
Sus últimos trabajos ratifican su tendencia por explorar nuevas formas y mensajes que, después de llevar a los espectadores por los caminos trepidantes del movimiento, nos vuelve a dejar en un estado de equilibrio y de reposo, propio de lo que pasa en la vida cuando hay extasis, sentimiento e inspiración.